Como sabéis, el método D’Hondt es una forma de asignar los escaños a partir de los votos recibidos por cada partido. En este método, cuando quedan por escrutarse unos pocos votos, hay que mirar al último escaño de la circunscripción, porque unos pocos votos de más podrían asignárselo a un partido distinto.
En este caso, en las elecciones de ayer el último escaño de Álava fue a parar al PSE; pero como se puede ver en la página web dispuesta por el Gobierno Vasco, al 100% escrutado y a falta del voto exterior, si el PNV obtuviera 338 votos más que el PSE, le arrebataría este escaño.
Como decimos, ese cambio podría ocurrirse al contabilizar el voto de los residentes en el extranjero (voto CERA). Pero en 2009 en Álava sólo hubo 436 votos llegados por este procedimiento, de manera que es muy difícil que se dé este vuelco. Pero habrá que ir actualizando esta información según sepamos más datos.